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Y una noche se convirtió en calabaza…
Pero cuidado, no sea cosa que reaparezca en "noche de brujas". Cristina se fue y los camporistas llenaron la Plaza de Mayo para despedir a “su jefa” con sus clásicos cánticos y consignas contra Macri y Clarín, pero afortunadamente todo transcurrió en calma.
Adelantándose a la gran fiesta de la Democracia, Cristina organizó su fiesta personal, su ego no le permitió entregarle el mando al nuevo presidente, tal vez de esa manera sienta que el poder sigue siendo suyo, con sus caprichos de adolescente empañó lo que pudo ser un día histórico, para convertirlo en el hazmerreír del mundo, ya que su negativa salió publicada en diarios y noticieros de gran parte del planeta, haciendo quedar a nuestro país en ridículo.
El miércoles 9 de diciembre la histórica plaza empezó a poblarse desde temprano, si bien los actos comenzarían a las 18, con la presentación del busto de Néstor Kirchner junto al de otros ex presidentes. Ya desde el mediodía llegaron algunas agrupaciones que ocuparon los lugares más cercanos al palco desde donde hablaría Cristina. Desde la mañana vendedores ambulantes ofrecían remeras con la figura de la mandataria, también banderas con su rostro y consignas de la militancia K.
Es increíble hasta dónde puede llegar el “lavado de cabeza” que le han hecho a los “militantes”, así le gusta que los llamen a estos fanáticos que no entienden de disensos donde todo lo que ellos dicen o hacen es bueno y los otros son el mal, el enemigo, el que llega para perjudicarlos. Mientras caminaba por la plaza me detuve a escuchar un matrimonio jóven, el padre, señalando la terraza de la Casa Rosada, le decía a un niño de 6 o 7 años aproximadamente “Vessssss, por ahí se va a ir Macri y a la Michetti le vamos a poner un cohete en la silla para que salga volando junto con él”. Lindo ejemplo le están dando a la criatura, ¿así es como se enseña a vivir en democracia? En fin…
Finalmente, Cristina habló de ella, de su maravillosa gestión, del espléndido país que le deja al nuevo presidente (nunca lo nombró), del 5% de desocupación, de los cohetes, de la industrialización, se apropió de los derechos humanos (recordemos que Alfonsín enjuició y mandó a la cárcel a los militares), de la Asignación Universal por Hijo (proyecto de Elisa Carrió cajoneado en el Congreso) y se olvidó de hablar de la inseguridad, del narcotráfico, de la corrupción, de los niños que murieron por desnutrición, de la tragedia de Once, de las inundaciones, del estado de los hospitales, etc. etc. etc.
Mientras, los “pibes para la liberación” y “los soldados de Perón” la vivaban en la plaza y cuando ella se retiró del palco brotaron las lágrimas, el desconsuelo, la tristeza de haber sido y el dolor de ya no ser.
www.conozcarecoleta.com.ar (2744) - Publicado: 14/12/15
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