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Despedida del barman de La Biela
La Biela es uno de los bares notables de la ciudad y el más emblemático del barrio de Recoleta. Desde aquellos tiempos, cuando se sentaban a sus mesas los corredores de autos, entre ellos el quíntuple campeón mundial de Fórmula 1, Juan Manuel Fangio, hasta nuestros días, han pasado por allí distintas personalidades del ámbito político, cultural, artístico, turístico y los porteños que gustan del lugar, donde ver y hacerse ver.
 Hace 40 años, comenzó a trabajar allí, Angel Palavecino, un catamarqueño que se desempeñó durante cuatro décadas como barman, deleitando a los clientes con tragos creados para todos los gustos. Ahora, a los 65 años, llegó el momento de descansar, abandonar esa tarea y retornar a sus orígenes, su querida Catamarca, donde todavía no sabe qué hará, más allá de disfrutar de esos "paisajes de Catamarca con mil distintos tonos de verde", su gente, sus afectos, sus costumbres. Sin embargo es casi una promesa, que volverá a Buenos Aires todos los años, a esta ciudad en la que vivió la mayor parte de su vida e incluso lo aporteñó un poquito, porque sigue conservando sus raíces de la provincia que lo vio nacer.
Recuerda con cierta nostalgia, que cambió el campo por una coctelera que le dio todo y a la que aprendió a acariciar, a mirar y a comprender en la Asociación de Gastronomía hasta que grabó los tragos en su memoria y se lanzó a este nuevo desafío que duraría 40 años. Algo que nunca había imaginado.
Si le consultan cuál ha sido el coctail más vendido, responde "El Negroni” (gin, Martini, Campari y la rodaja de naranja) -no duda-. El americano seco; la vaina chilena (ron, coñac y yema), el pisco, el whisky souer." Y no podía faltarle, el trago La Biela (ananá, naranja, ron Negrita, Cointreau y Campari).
También analiza los cambios a través del tiempo, ya que los gustos de la gente han ido cambiando y es así que hoy, la mayoría de los jóvenes que van a la Biela piden gaseosas, cerveza o Fernet.
¿Cuántas historias habrá presenciado Angel a lo largo de tantos años?
Muchísimas!!! pero siempre ha sabido tener la discreción necesaria como para ver, oír y callar. Simplemente recordará que ha sido tratado con gran amabilidad por la mayoría de los clientes e incluso, tiene gratos recuerdos de un vecino del barrio y habitué de La Biela, fallecido hace poco tiempo, Roberto Perfumo.
Seguramente extrañará llegar cada día al bar, tanto como sus compañeros y clientes lo extrañarán y recordarán a él.
www.conozcarecoleta.com.ar (2473) - Publicado: 30/11/16
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