|
Aniversario del fallecimiento de Favaloro
El 29 de Julio de 2000, moría en Buenos Aires, el doctor, René G. Favaloro. Médico cirujano, fue el primero en realizar una cirugía de revascularización miocárdica, también llamada bypass. Había nacido en La Plata el 14 de julio de 1923. Este sábado se cumplieron 17 años de aquella trágica tarde en que el destacado cardiocirujano decidió quitarse la vida.
 Increíble decisión, para un hombre que tanto apreciaba la vida y las pequeñas cosas. Siempre contaba que fue gracias a su abuela materna, quien le transmitió su amor por la naturaleza y la emoción al ver cuando las semillas comenzaban a dar sus frutos. A ella le dedicaría su tesis del doctorado: “A mi abuela Cesárea, que me enseñó a ver belleza hasta en una pobre rama seca”.
¿Quién no conoce su trayectoria como médico?, su dedicación al servicio de la medicina y de sus pacientes, que estarán eternamente agradecidos por haber estado en sus manos y en muchos casos, salvado sus vidas.
Tal vez, menos se sabe de su vida personal y por eso, es importante destacar la humildad de este hombre que con gran esfuerzo llegó a ser tan valorado a nivel mundial. Un hombre que siempre buscaba más, investigando y tratando de mejorar la salud de la gente, mediante nuevas técnicas que han sido revolucionarias en la historia de la medicina, pero además, realizó una importante tarea docente, transmitiendo sus conocimientos.
Pocos saben que Favaloro, más allá de haber creado el bypass o cirugía de revascularización miocárdica, ha sido el inventor de varios elementos importantes para la medicina y jamás los patentó. Las destrezas manuales que Favaloro desarrolló en la carpintería de su padre y su habilidad de diseñador produjeron numerosos instrumentos quirúrgicos, muchos de los cuales son hoy ampliamente usados en cirugía cardíaca: retractores cardíacos, tijeras para las arterias circunflejas, clamps parciales, separadores para disecar mamarias, dispositivos para las camas de los pacientes, entre otros. Se negó a patentar sus inventos por considerar que sus finalidades eran salvar vidas, no hacer dinero.
Los aportes tecnológicos de Favaloro fueron tan artesanales (basados en técnicas manuales) como racionales (basados en conocimientos científicos), mostrando que los problemas humanos no se resuelven sólo con tecno-ciencias.
Un aporte desinteresado que podía haber significado importantes ganancias y nunca le importó. Asimismo, su valoración en el exterior no lo envaneció, siempre volvió a su país, para devolver a su gente todo lo que aquí aprendió.
En este nuevo aniversario de su muerte, le rendimos un humilde homenaje al destacado médico y al hombre que supo predicar con su ejemplo.
www.conozcarecoleta.com.ar (2693) - Publicado: Sábado 29/07/17
| 
