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Se cumplen 124 años del natalicio de Jorge Luis Borges

El destacado escritor, poeta, cuentista y ensayista, que había nacido en Buenos Aires, el 24 de agosto de 1899 y falleció en Ginebra, Suiza, el 14 de junio de 1986.

Jorge Luis BorgesCultivó varios géneros, que a menudo fusionó deliberadamente, aunque según dicen algunos intelectuales, ocupó un puesto excepcional en la historia de la literatura por sus relatos breves.

Borges procedía de una familia de próceres que contribuyeron a la independencia del país. Un antepasado suyo, el coronel Isidro Suárez, había guiado a sus tropas a la victoria en la mítica batalla de Junín; su abuelo Francisco Borges también había alcanzado el rango de coronel y su padre, Jorge Borges Haslam, fue quien rompiendo con la tradición familiar se empleó como profesor de psicología e inglés. Estaba casado con la delicada Leonor Acevedo Suárez y el matrimonio tuvo dos hijos, Norah y Jorge Luis.

Aprendió a leer inglés con su abuela Fanny Haslam, a quien recordó toda su vida. Con apenas seis años confesó a sus padres su vocación de escritor, e inspirándose en un pasaje de Don Quijote de la Mancha redactó su primera fábula cuando corría el año 1907: la tituló La visera fatal. Sabía claramente lo que quería aunque tal vez nunca imaginó que llegaría tan lejos.

Debido al trabajo de su padre, vivieron en París, Milán y Venecia hasta radicarse definitivamente en la neutral Ginebra cuando estalló la primera guerra mundial, en 1914. Borges era entonces un adolescente que devoraba incansablemente la obra de los escritores franceses más reconocidos.

De regreso en Buenos Aires, en 1921 fundó con otros jóvenes la revista Prismas y, más tarde, la revista Proa; firmó el primer manifiesto ultraísta argentino, y, tras un segundo viaje a Europa, entregó a la imprenta su primer libro de versos: Fervor de Buenos Aires (1923). Luego seguirían otras magníficas obras como: Luna de enfrente (1925), Cuaderno San Martín (1929) y otros de ensayos, como Inquisiciones, El tamaño de mi esperanza y El idioma de los argentinos.

Su actividad intelectual lo vinculó a Victoria Ocampo y Silvina Ocampo, quienes le presentaron a su vez a Adolfo Bioy Casares, pero su consagración internacional no llegaría hasta muchos años después.

En 1938, año en que falleció su padre, comenzó a perder la vista y se vio obligado a dictar sus cuentos fantásticos. Desde entonces requirió permanentemente de la ayuda de su madre y de sus amigos para poder escribir y dicha colaboración fue muy fructífera.

En 1950, la Sociedad Argentina de Escritores lo nombró presidente de la misma y eso no fue un obstáculo para que en esta época de tribulaciones, se publicara su libro más difundido y original, El Aleph (1949), además de seguir trabajando incansablemente en nuevas antologías de cuentos y nuevos volúmenes de ensayos antes de la caída del peronismo en 1955.

Escultura Jorge Luis BorgesTambién fue director de la Biblioteca Nacional desde 1955 hasta 1973 e ingresó en la Academia Argentina de las Letras. Enseguida los reconocimientos públicos se sucedieron: Doctor honoris causa por la Universidad de Cuyo, Premio Nacional de Literatura, Premio Internacional de Literatura Formentor (que comparte con Samuel Beckett), Comendador de las Artes y de las Letras en Francia, Gran Premio del Fondo Nacional de las Artes de Argentina, Premio Interamericano Ciudad de Sèo Paulo...

En 1967 contrajo matrimonio con una antigua amiga de su juventud, Elsa Astete Millán y se separaron en 1970. Pocos años antes de su muerte, ya octogenario, se casó con María Kodama, su secretaria, compañera y lazarillo: una mujer mucho más joven que él, de origen japonés, a la que nombraría su heredera universal. Como es de público conocimiento, Kodama falleció el 26 de marzo de 2023 y lo que había heredado de Borges, ahora fue heredado por los hijos de Jorge Kodama, hermano de María: Mariana del Socorro y Massini, Martín Nicolás Kodama y Massini, María Victoria Kodama y Massini, Matías Kodama y Massini María Belén Kodama”.

Lo cierto es que aunque alguna vez, Jorge Luis Borges, manifestó su deseo de ser sepultado en Recoleta, eso no ocurrió. María Kodama lo sepultó en Ginebra y ahora, al fallecer ella, cuyos restos descansan en el Cementerio Parque Memorial en Pilar, fue su abogado, Fernando Soto, quien hizo declaraciones al respecto diciendo: "Con María nos fuimos oponiendo a cada uno de esos pedidos repetidos y, de haber nuevos, mantendremos esa postura".


www.conozcarecoleta.com.ar (4411) - Publicado: Jueves 24/08/23