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Fallo a favor del Museo Nacional de Bellas Artes
En 1933, Juan Girondo, padre del destacado escritor Oliverio Girondo, donó al Museo Nacional de Bellas Artes 25 obras que habían sido adquiridas durante sus viajes, entre las que se destacan una de Degas, otras de Camargo, Zuloaga, Figari y otros reconocidos pintores.
En 1996, Alberto Girondo, nieto del donante, había iniciado una demanda, reclamando la restitución de las obras, que ahora, después de 15 años, fue rechazada por la Corte Suprema, poniendo fin a esta pelea judicial, por lo cual, las obras de la colección de Juan Girondo permanecerán en el Museo Nacional de Bellas Artes.
La Cámara Civil, en coincidencia con el juez de primera instancia, señaló que el planteo de revocar la donación por parte del demandante se fundó “en el incumplimiento de un cargo haber dado el nombre de un donante a una de las salas del MNBA y no adoptar idéntico proceder respecto de su bisabuelo (el escritor), pero que el conflicto había quedado liberado en el año 1971 con la apertura de la denominada Sala Santamarina”, un “hecho notorio” pero que no se había “impugnado en tiempo oportuno”.
Sobre esta base estimó que la demanda, iniciada en 1996 “se halla prescripta”. O sea que el reclamo fue iniciado mucho después de la fecha en la que se pudo haber constatado la omisión de ponerle el nombre de Girondo a una de las salas, tal como había sido en su momento la voluntad del donante.
El demandante dijo que conoció los términos de la donación en 1996 y por tal motivo no había iniciado el juicio antes.
La tasación realizada hace al menos diez años por los peritos judiciales estableció el valor de las obras en unos 10 millones de dólares. Sólo el pastel de Degas fue tasado en más de 5 millones. El nieto de Girondo había reclamado la devolución o el pago de las obras.
De los 25 cuadros donados, 2 habían sido robados (“El Sr. Feydeau y su hijo George”, de Honoré Daumier, sustraído del MNBA en diciembre de 1980; y “Paisaje”, de Henri Lebasque, hurtado de la Escuela Naval Militar de Río Santiago, “donde se encontraba en carácter de préstamo desde 1958”); y otros dos se hallaban, a la fecha, en la residencia Presidencial de Olivos (“El marmitón limpiando los cobres”, de Joseph Bail, desde 1983; y “Napolitana”, de Antonio Manzini, desde 1963”).
Susana Espósito para www.conozcarecoleta.com.ar (2298)
Fecha de publicación (05/03/11)
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