Dos "grandes" amigos en la Biela
Dentro de las personalidades destacadas que han sido vecinos de Recoleta, se encuentran Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares, reconocidos escritores, a los que además de unirlos la pasión por la literatura, los unió una gran amistad.
En 1924, Jorge Luis Borges fue a vivir con su familia a la avenida Quintana 222 y luego se mudó a Quintana 263, donde vivió entre 1943 y 1946. Allí escribió la mayor parte de su libro "El Aleph".
Bioy Casares vivió en Posadas 1650, junto con su esposa, Silvina Ocampo, en el Edificio Ocampo, un Palacio que mandó a construir Manuel Ocampo para sus 5 hijas, entre ellas Victoria y Silvina Ocampo. El edificio tiene 5 pisos, uno para cada hija, y un último piso para la servidumbre, el inmueble fue proyectado por el arquitecto Alejando Bustillo.
Estos dos amigos solían encontrarse en distintos puntos de Buenos Aires y uno de sus preferidos fue La Biela, emblemático bar y restaurante del barrio de Recoleta, en avenida Quintana y Raúl M. Ortiz, donde tantas veces compartieron el café y la charla. Así, de esa manera puede vérselos ahora, recreando esa situación mediante dos esculturas que ocupan una mesita del lugar, que encontramos al ingresar por la esquina.
Hace ocho años habían colocado la escultura de Borges y luego de un tiempo fue retirada. Según nos explicó Alejandro, unos de los dueños del bar, esa escultura pertenecía a un señor, propietario de un hotel en Villa Gesell, que consideró que luciría más sentado en una mesa de La Biela. Hace cuatro años la retiraron para una exposición relacionada con Borges y nunca más volvió.
Alejandro nos dijo que como se había enterado por medio de los turistas, que en muchas revistas de turismo, hasta en Bélgica, publicaban que en la Confitería La Biela, de Buenos Aires, se podía encontrar a Borges tomando un café y cuando llegaban al local y no lo encontraban se sentían defraudados, entonces encargó al artista plástico que construyera una obra similar a la anterior.
Ahora una nueva escultura, realizada por Fernando Pugliese, ha regresado y además acompañado por su amigo Bioy Casares.
Seguramente sea toda una sorpresa para la gran cantidad de turistas y porteños que cada día llegan a esa confitería emblemática del barrio, que ahora les da la posibilidad de tomar un café simbólico con dos grandes escritores y además, tomarse una fotografía.
www.conozcarecoleta.com.ar (2378) - Fecha de publicación (14/08/12)
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