Aniversario de la repatriación de los restos de San Martín
Hoy se cumplen 139 años de la repatriación de los restos del General Don José de San Martín, quien falleciera el 17 de agosto de 1850 en Boulogne Sur Mer, donde había sido sepultado hasta decidir su traslado, que fue posible mediante colectas populares que fueron destinadas al costo del mismo y también a la construcción de su mausoleo en la Catedral de Buenos Aires.
La prensa de Francia expresó en su momento: "Ha muerto uno de los más grandes ciudadanos que haya producido la revolución de la América del Sur. Nadie ha sido más valiente y hábil sobre el campo de batalla; más prudente y capaz en los consejos; ninguna vida política ofrece el ejemplo de una abnegación más completa y de un patriotismo más puro y modesto".
En agosto de 1864, se sancionó la ley por la que se autorizó al Poder Ejecutivo para hacer los gastos que demandó el traslado a la República, de los restos del benemérito brigadier general José de San Martín. El legislador Martín Ruiz Moreno había cerrado su fundamentación en la Cámara de Diputados de la Nación diciendo: "El general San Martín fue quien conquistó nuestra independencia, el que dio vida como nación a la república, de manera que nadie con más derecho que la República Argentina para guardar sus restos: poseer su corazón, no es bastante".
El 5 de abril de 1877, aniversario de Maipú, el presidente Nicolás Avellaneda instaba al pueblo a repatriar los restos del Libertador: "Las cenizas del primero de los argentinos, según el juicio universal, no deben permanecer por más tiempo fuera de la patria. Los pueblos que olvidan sus tradiciones, pierden la conciencia de sus destinos, y los que se apoyan sobre tumbas gloriosas, son los que mejor preparan el porvenir." El pueblo argentino respondió generosamente y mediante colectas populares y fondos nacionales se construyó su mausoleo en la catedral.
En abril de 1880, el transporte naval "Villarino" hizo su viaje inaugural al puerto de El Havre. El día 21, Mariano Balcarce entregó los restos del general San Martín al capitán del buque para su embarque y traslado a la República Argentina.
El día 28 de mayo de 1880, el "Villarino" llegó al puerto de Buenos Aires. En solemne cortejo y sobre una carroza fúnebre construida a similitud de la que llevó el ataúd de Wellington en 1852, los restos del Libertador fueron trasladados a Plaza San Martín, frente a su monumento ecuestre. En su discurso de homenaje, el presidente argentino Nicolás Avellaneda, afirmó: "¡Guerreros de mi patria! ¡Conciudadanos! Inclinémonos sobre estos sagrados restos y oiremos que suena nuevamente en las alturas la voz que dijo: 'El general San Martín no derramará la sangre de sus compatriotas y sólo desnudará la espada contra los enemigos de la Independencia Suramericana'. Vuestro último voto se encuentra cumplido. Descansáis en vuestra tierra".
De esta forma, se cumple finalmente con la cláusula cuarta del testamento ológrafo del Libertador San Martín: "Prohíbo el que se me haga ningún género de funeral, y desde el lugar que falleciere se me conducirá directamente al cementerio, sin ningún acompañamiento, pero sí desearía, el que mi Corazón fuese depositado en el de Buenos Aires".
www.conozcarecoleta.com.ar (3218) - Publicado: Martes 28/05/19 Acuarela de Delia Suárez "El cortejo fúnebre se estaciona frente a la catedral". Pinacoteca Virtual Sanmartiniana. Instituto Nacional Sanmartiniano. Buenos Aires, 2006.
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