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Recordando a Horacio Ferrer
El martes 2 de junio, el poeta, escritor y compositor, Horacio Ferrer, hubiese cumplido 87 años. Vivió gran parte de su vida en el Hotel Alvear, en Recoleta, el barrio que amaba.
 Hace algunos años, cuando estaba a punto de viajar a Bruselas, por trabajo y para celebrar su cumpleaños con su esposa Lulú, le hicimos una linda nota en la que nos contaba por qué amaba tanto a Recoleta:
"Mi madre nació en Esmeralda y Juncal en 1896. Ella vivió 93 años y de chica venía a jugar a la Recoleta. Ella jugaba bajo las magnolias cuando tenía apenas 4 años.
“Mi abuelo está sepultado en Recoleta".
“El barrio es muy entrañable para mí por razones familiares y además porque me encanta todo esto. Es un barrio pituco, de gente adinerada y que vive bien. Yo elegí el barrio por esas razones y porque me encanta, es un barrio popular, fino, con un espacio urbanístico majestuoso, con ese parque comprendido entre las calles Vicente López y la avenida Alvear, Libertador que es una preciosura y las ferias artesanales de los fines de semana. Es un barrio que yo amo y le he escrito una canción, hace 7 u 8 años, con música de Mario Cosentino que se llama La Recoleta y canta Jairo”.
"Un día estaba frente a la ventana, sentado en la computadora y miraba delante de mí, tenía todo el parque, bueno... no tuve más que copiar la realidad".
Vivió en el Hotel Alvear desde 1976 hasta su fallecimiento. Todos lo conocían y saludaban con respeto y afecto.
Decía que la vida lo había premiado viviendo en dos Palacios: El Hotel Alvear y el Palacio Carlos Gardel, que es la Academia.
Horacio Ferrer fue el impulsor de la Academia Nacional del Tango, que funciona en primer piso del edificio donde está el Café Tortoni, en PB. Allí en su vereda se encuentra emplazada una escultura del poeta.
Amante del tango, amigo de Aníbal Troilo y Astor Piazzolla, entre otros tantos. Algunas de sus obras fueron: una antología de poemas, Romancero Canyengue, El libro del tango, Arte Popular de Buenos Aires. Colaboró con Piazzolla en la letra de la operita "María de Buenos Aires" y la emblemática "Balada para un loco", a la que el reconocido bandoneonista musicalizó. La inspiración de Ferrer fue inmensa y se plasmó en las letras de muchísimos tangos, que aportaron prestigio a su carrera.
Murió el 21 de diciembre de 2014, su funeral fue en la legislatura de la ciudad y luego fue incinerado en el Cementerio de la Chacarita. Sus cenizas fueron esparcidas en el Río de la Plata, tal vez para que su alma permanezca entre su ciudad natal (Montevideo) y su ciudad por elección (Buenos Aires).
www.conozcarecoleta.com.ar (2578) - Publicado: Martes 02/06/20
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