El Gobierno porteño analiza modificaciones de las bicisendas
El Gobierno porteño analiza modificaciones en las bicisendas de la ciudad, ya que algunas han sido muy cuestionadas por los vecinos y se están evaluando posibles anulaciones o cambios que resulten favorables.
Todos hemos comprobado que la bicicleta es uno de los medios alternativos de movilidad sustentable o en tiempos de pandemia, cuando no se podía viajar en medios de transporte público, ha sido una solución para muchos que han tenido que desplazarse a los trabajos, a hacer trámites, a un médico.
Las primeras bicicletas de alquiler de un sistema público llegaron a la ciudad de Buenos Aires en junio de 2009. Eran amarillas y verdes, diferentes a las anaranjadas que circulan hoy y que comenzaron a tener publicidad y uso tarifado. El modelo cambió, evolucionó y la red de ciclovías se amplió año tras año. Pero esta nueva gestión avanza en el análisis de la infraestructura de bicisendas ya existente que podría ser modificada o anulada. La medida podría tener un gran impacto.
Fuentes del Gobierno porteño comentaron que si se pudiese, la ciclovía de la avenida del Libertador, la levantarían toda. Es una de las últimas inauguradas durante el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta para conectar a los ciclistas desde la General Paz hasta Retiro. Ubicados en ambos sentidos de circulación los carriles exclusivos no se vinculan de la mejor forma con el resto de la geografía urbana, principalmente, en la zona de clubes y donde hay ingresos de vehículos en cocheras privadas. La cantidad de ciclistas que circulan por ahí, además, también se pone en duda.
El entorpecimiento del espacio y el caudal de usuarios, son los dos ejes que analiza el Gobierno de la ciudad para determinar cuál bicisenda o ciclovía dejará de ser parte de la red que ya alcanzó los 300 kilómetros. Red que hasta hace poco prometía ampliarse, con más calles y estaciones, hasta que llegó el cambio de gestión.
Jorge Macri tiene como objetivo avanzar en la recuperación del espacio público y, como en este caso, resignificar el uso. La planificación encarada respecto de cómo seguir con las bicisendas dependerá de los resultados de análisis que se están realizando.
“Con las imágenes de las cámaras del sistema de monitoreo y la aplicación de inteligencia artificial esperamos tener datos concluyentes para determinar cuál bicicenda se usa y cuál no. O cuáles son las que tienen menos flujo de ciclistas. Sumado a eso, evaluaremos de qué forma interviene y convive con el resto de la gente. Por ejemplo, si hay una bicisenda en la puerta de un colegio, la vamos a sacar”, cuentan en la Ciudad.
En 2009, cuando se lanzó el sistema ECOBICI, los viajes que se hacían en bicicletas representaban el 0,4% del total de traslados dentro de la ciudad. Hoy, con 300 kilómetros de bicisenda y 353 estaciones que llegaron a todos los barrios de la ciudad, los viajes representan el 7% del total y, por día, pueden alcanzar los 400.000.
De acuerdo al Plan de Movilidad Sustentable para 2030, a los 3.000.000 de habitantes aproximados de la Ciudad se le suman 1.400.000 que ingresan todos los días hábiles (contra los 200.000 porteños que van hacia el conurbano). Diariamente se realizan 5.400.000 de viajes con la siguiente distribución: 44,7% en transporte público, 20,7% en vehículos motorizado particulares; 26,1% a pie; 7% en bicicleta; y 2,2% en vehículos motorizado compartido.
Juan Ignacio Fulponi, economista y magíster en Planificación del Transporte considera que algunos tramos se han creado sin planificación del uso del espacio público y la demanda del transporte. Muchas bicisendas en las veredas que están mal diagramadas, y que faltan proyectos buenos que fomenten la intermovilidad. Asimismo agregó que es pro ciclovía pero se tiene que rever algún tramo para que sea más eficiente la red.
Pero como en todos los cambios, encontraremos personas que están a favor y otras en contra, por ejemplo, en la Coalición Argentina de Movilidad Segura se muestran sorprendidos por la posibilidad que se reduzca la extensión de la red de ciclovías después de la impronta que tomó el tema durante los últimos 16 años de gestión del PRO. “Cuando el nuevo Gobierno habla de revisar, se encienden las alarmas, todos los movimientos de ciclistas están alarmados. La ciclovía de Libertador es de las mejores obras que se hicieron a pesar que el proyecto original no se completó hasta Retiro”, argumenta Pablo Lebedinsky, miembro de la Coalición.
www.conozcarecoleta.com.ar (4467) - Publicado: Viernes 01/03/24
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